Participar en el Encuentro de Mujeres Raíces de Luz me ha dejado
muchas confirmaciones.
Observar la presencia de unas 2000 almas compartiendo un
objetivo común; la presencia de mujeres,
hombres y tantos niños me hace pensar y sentir que el tiempo del cambio lo
estamos presenciando y es ahora. Todos uno y diversos como los colores del arco
iris transitando la magia del arte de vivir en en plenitud. ¡Sencillamente delicioso!Todas las actividades tuvieron su importancia y la integración masiva de quienes resonamos con el despertar de la energía femenina en hombres y mujeres, a fin de caminar en equilibrio por esta bendita Madre Tierra.
Excelente entrega de quienes compartieron con amor sus talleres transformadores. No faltó el canto, la danza, las prácticas diversas y las ceremonias.
La participación de la Abuela Margarita sació mi alma con su sabiduría de Ser pleno que compartió con humildad y grandeza lo que vive, riendo como una niña feliz.
Su invitación a recordar quienes somos viviendo con poder interior, honrando la vida en todas sus expresiones. Nada quedó librado al azar, los temas elegidos y extensamente desarrollados: “El cambio viene por la mujer”, “El origen del Ser”, “La sabiduría delos 4 elementos”, “Honrar y agradecer al Padre Sol y a la Madre Tierra”.
Explicó con gran naturalidad lo que representa la Pirámide del Conocimiento, expresado el poema de Quetzalcoatl.
Hubo una gran la claridad para tratar abiertamente el tema
de la sexualidad del hombre y la mujer, del poder de creación de la fuerza de
nuestros órganos sexuales y cómo elevado al corazón y llevado a las ideas puede
plasmar con fuerza.
Un tema que me pareció maravilloso son las etapas de vida en
base al 13 para vivir con plenitud cada ciclo. Respetar cada momento de nuestro
proceso para sacarle el máximo de provecho con gratitud y alegría y compartirlo
a su vez con otras personas. Comprender lo que es abrir la maternidad universal
donde los seres humanos pasan a ser los hijos de la vida y donde la entrega
desde el amor es fundamental, confirmó un sentir muy interno.
Otro momento fue el reconocimiento del útero sagrado de
nosotras y nuestras ancestras en la ceremonia con Laurita Geremi. Meditando y luego las mujeres en larga fila
caminamos hacia el fuego desapegándonos de alguna cuestión para retornar
mirándonos brevemente a los ojos, ese espejo del alma donde nos vimos
reflejadas unas a otras, compartiendo la complicidad de la transformación
conciente en este tiempo.
Sería escribir un libro acerca de las vivencias, sin embargo
que sea este una pequeña fuente de inspiración para que cada cual inicie su
búsqueda dentro de si y siga su instinsto e intuición.Que los círculos de mujeres se activen en toda la Pachamama y que se produzcan muchos encuentros como este.
Mi compromiso con la vida queda reconfirmado. Gracias Gracias Gracias!
Warani Caracciolo
mail: waracolibri@gmail.com
Muchas gracias por compartir, seguramente el próximo año muchos estaremos allí también. Lucre
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